sábado, 3 de enero de 2015

Roy Campbell, guía discográfica

New Kingdom (Delmark, 1992) ****
Según Campbell el título se refiere a una generación de músicos que no siendo ajenos a la vanguardia se mantienen apegados a la tradición. Aunque el trompetista se inició en la escena de los lofts a través de William Parker y el Muntu de Jemeel Moondoc, antes de este debut se había curtido en toda clase de estilos: bop, r&b, funk, habiendo participado también en contextos muy libres, como el estreno del grupo cooperativo Other Dimensions in Music.

New Kingdom, que comienza rindiendo tributo al que fuera su maestro, Lee Morgan, es fiel reflejo de esa filosofía, en buena parte cercano al post-bop, pero sin dejar de lado un espíritu más libre. La formación es básicamente un quinteto con músicos con los que venía colaborando anteriormente en su banda Tazz, como el vibrafonista Bryan Carrott, que aporta un colorido especial, aunque también hay un primer adelanto del que será su Pyramid Trio con Parker y el baterista Zen Maatsura. En algunos temas se les une como invitado el saxofonista Zane Massey, que firma la balada "Peace" y que a raíz de esta sesión debutaría como líder también en Delmark.

Desde sus comienzos, Campbell muestra su facilidad para componer grandes melodías, a veces dando rienda suelta a su fogosidad: "Thanks to the Creator", otras en su vena más lírica: "Mariescia". Parker también contribuye con dos composiciones, una de ellas dedicada al trombonista Clifford Thornton. El solemne himno "Spiritual Rejuvenation" cierra un disco que es una perfecta introducción a la obra del trompetista.

La Tierra del Fuego (Delmark, 1994) ***½
El segundo disco de Campbell no fue recibido con mucho entusiasmo, en parte porque inspirándose en el jazz modal de los 60 resulta algo fuera de época, sonando como un Blue Note tardío o alguno de sus derivados de la década siguiente. En estos años Campbell pasa largas temporadas en Rotterdam, donde colabora con Klaas Hekman (que toca su saxo bajo en dos temas del disco) y se dedica a arreglar y componer música para grandes bandas, lo que le da pie para cultivar esa faceta en esta grabación.

En La Tierra del Fuego repiten varios músicos que aparecían en New Kingdom, como Zane Massey y Ricardo Strobert, pero en este caso en lugar de vibráfono opta por el piano de Rahn Burton, antiguo acompañante de Roland Kirk, que le aporta un aire más clásico. El título en español denota el gusto del trompetista por los aromas latinos, desde los boleros al flamenco, que se refleja en melodías con reminiscencias de los arreglos de Gil Evans para Miles. "Booker's Lament" delata su devoción por Booker Little, del que cita el Out Front como uno de los discos seminales en la historia de la trompeta en el jazz. En definitiva, un disco más irregular que su debut, pero con muy buenos detalles entre los cuales mi favorito es la delicada belleza de "Charmaine".

Communion (Silkheart, 1995) *****
Un aparente giro radical en el que supone el debut de una de sus grandes bandas, el Pyramid Trio. De tener como referencias a Booker Little y el post-bop de los 60, Campbell pasa a rendir tributo al santoral del free: Don Cherry, Albert y Don Ayler, Marvin "Hannibal" Peterson. Pero para el trompetista la línea hasta el free no supone ninguna ruptura, es parte de una misma tradición y engloba los estilos anteriores. El espíritu de Cherry impregna toda la trayectoria del Pyramid Trio, no solo el de su clásico cuarteto con Ornette, sino el de sus posteriores excursiones por la música de otras culturas.

El disco cuenta con la bendición de que el baterista circunstancial sea Reggie Nicholson, que ya había aparecido en La Tierra del Fuego, en lugar del original del Pyramid, Zen Maatsura. Con él se nos brinda la oportunidad única de disfrutar de un trío sensacional. Temas majestuosos como "Vigilance" o el blues que sirve de tributo ayleriano, se construyen sobre imponentes riffs de Parker y la asombrosa invención rítmica de Nicholson, el percusionista ideal en este contexto con un estilo tan particular como el de Ed Blackwell. Bajo mi criterio, Communion es una de las joyas del post-free, de las más redondas del espectacular catálogo de la etiqueta sueca Silkheart, abanderada del nuevo jazz americano.

Ancestral Homeland (No More, 1998) ****
Segunda entrega del Pyramid Trio, esta vez con la formación original con Parker y Maatsura. El tema inicial está dedicado a Alan Shorter, mientras que "Brother Yusef" es un tributo a Yusef Lateef, con el que Campbell se había adentrado en el estudio de diversas músicas folklóricas, no solo africanas sino también orientales.

Como se refleja en su título el disco se orienta claramente hacia una particular World Music, indagando en esos ritmos ancestrales y universales característicos de buena parte de la producción discográfica de Parker. El resultado es más enigmático y no tan rotundo como el anterior, aunque temas como "Ogala Eclipse" o "Camel Caravan" mantengan intacto el mismo espíritu.

Ethnic Stew and Brew (Delmark, 2001) ****½
Tercer disco del Pyramid Trio y nuevo cambio en la batería, en este caso Campbell está apoyado por la sección rítmica por excelencia del post-free, la que forman Parker y Hamid Drake. Aunque se mantenga el interés en probar diferentes ritmos, incluso un amago de reggae en el tema que le da título, o la inspiración oriental de "Impressions of Yokohama", en el que Parker se pasa al sakuhachi, la tradicional flauta japonesa, la sensación general que transmite es la de un disco mucho más directo que el anterior, incluso con una mayor contundencia rítmica que Communion.

El africanismo de Drake se hace patente en el arranque de "Amadou Diallo", un impactante tema inspirado en la trágica muerte, a manos de la policía neoyorquina, de un inmigrante guineano en 1999, que finaliza con una ráfaga de notas que emula los 41 disparos que acabaron con su vida. El disco encontró una buena recepción por parte de la crítica, llegando a figurar como número 3 en la lista de destacados de 2001 de la revista JazzTimes.

It's Krunch Time (Thirsty Ear, 2001) ***
Bajo el paraguas de las Blue Series, con las que se estrenaba en la la dirección artística el pianista Matthew Shipp, It's Krunch Time es un disco con un sonido un tanto extraño, un intento que no acaba de cuajar de dirigir la música de Campbell hacia terrenos más contemporáneos en los que el trompetista no se encuentra tan cómodo como en ocasiones anteriores.

Con un cuarteto en el que vuelve a rodearse de un vibrafonista, en este caso Khan Jamal, viejo colega en las bandas de Moondoc, y con una de las últimas apariciones del contrabajista Wilber Morris, probablemente la elección de Guillermo E. Brown en la batería no sea la más adecuada y cerrar el disco en solitario con una deslucida versión del himno americano tampoco parece la mejor idea posible. Algunos temas brillantes como el dedicado al desaparecido Denis Charles no borran la impresión general de una obra insatisfactoria.

Akhenaten Suite (AUM Fidelity, 2008) *****
Tras varios años de silencio discográfico como líder, en los que no obstante sigue manteniendo una frenética actividad como sideman, Campbell presenta una extensa y ambiciosa suite dedicada al faraón egipcio Akenatón, un encargo de Arts for Art para su estreno y grabación en la edición de 2007 del Vision Festival, el escaparate del post-free neoyorquino que se mueve en torno a William Parker.

Inspirado en antecedentes como la Far East Suite de Duke Ellington, Campbell compone una obra de sonoridades exóticas, con una exuberancia y una frescura que enamora a la primera escucha, a un tiempo lírica y explosiva. El quinteto suena perfectamente cohesionado con un papel destacado del violinista Billy Bang, viejos colaboradores como Carrott y Maatsuda, y la incorporación del contrabajista Hilliard Greene. Una perfecta síntesis de todas sus influencias, aunque tan diferente a su producción anterior que el tema que la cierra, "Sunset on the Nile", podría evocarnos fácilmente una composición firmada por John Zorn e interpretada por alguno de los derivados del universo Masada. Una pequeña obra maestra.

4 comentarios:

  1. Muchas gracias por esta discografía comentada de un músico que me encanta y del que no resulta fácil conseguir los discos.
    Espero que se anime usted a comentar también la extensa discografía en la que aparece Campbell como colaborador.

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  2. Gracias a ti. La discografía como sideman de Campbell es muy extensa y no la controlo totalmente, pero en principio y poco a poco espero seguir comentando la de Other Dimensions in Music, o la músicos con los que Campbell ha colaborado como Jemeel Moondoc, Rob Brown o Whit Dickey.

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  3. Será bien recibida, al menos por mi parte. Gracias de nuevo.

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  4. Esta guía me viene estupenda, zenquiu.

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