Pero al margen de múltiples colaboraciones, su base de operaciones es su trío con la impecable rítmica de John Hebert y Ches Smith que en Saturn Sings se amplió a quinteto con el saxo y trompeta de Jon Irabagon y Jonathan Finlayson. Si su última entrega Bending Bridges resultaba más previsible al repetir fórmula, con la extensión a septeto con el trombón de Jacob Garchik y el saxo de Ingrid Laubrock, se recupera una irresistible sensación de frescura, de escuchar algo completamente original.
Por primera vez en la trayectoria de la guitarrista el disco incluye una versión, el tema de Philip Catherine Nairam, si bien la elección no es una sorpresa dada su devoción por Robert Wyatt, que lo reinventaba como Maryan en su álbum Shleep. Pero dejando más en segundo plano su técnica guitarrística, Illusionary Sea no hace sino reafirmar su talento como compositora, temas sinuosos como Smiles of Great Men, con un sonido que parece un híbrido entre Sonic Youth y Henry Threadgill (la sombra del saxofonista planea sobre buena parte del jazz más selecto del momento, sin ir más lejos sobre el primoroso debut del trompetista, Moment and the Message), preciosas melodías como la de Red Sky Still Sea, verdaderos himnos como ese arrollador arranque de Butterfly Orbit. Probablemente Halvorson ha firmado su disco más deslumbrante hasta la fecha, una joya ante la que deberían rendirse incluso los más reticentes.
una chica que molaria ver mucho. y mas en un contexto como el braxton, del que ha llegado oferta de un sexteto tan irresistible como poco accesible economicamente. es lo que hay.
ResponderEliminarEste verano pude oír al Falling River Music Quintet de Braxton en Berlin y la Halvorson queda bastante en segundo plano en esa formación.
ResponderEliminarYo tuve la suerte de verla este verano tanto con ese sexteto como con su banda, y creo que el motivo de que me chirriara un tanto éste comentario sobre su último disco, fue que no acabó de gustarme ése su último proyecto, y como decía, puede que fuese porque primero la vi con Braxton y después de eso..... ya es difícil que.... pero es que además hubo un par de sus acompañantes que no acabaron de convencerme, Finlayson y Smith, por supuesto que sin dejar de reconocer que son dos musicazos, el trompetista es un virtuoso pero, o es muy joven y todavía le queda por crecer artísticamente, o si piensa basar su carrera en lo que actualmente nos está ofreciendo no va a ser de los " míos " lo encuentro soso, sin alma, cuando te leí, Cayetano, calificar de primoroso su último disco me fui corriendo a buscarlo, y aunque solo pude escuchar un tema... no, no me hizo tilín. Lo de Ches Smith supongo que fue por exigencias del guión, o mejor dicho de la partitura, porque no solo él, todos la siguieron al pie de la nota, lo pude comprobar cuando escuché la grabación. Me encanta la Halvorson desde que la descubrí en aquel trío de Braxton con Bynum en el San Juan Evangelista, y tengo muchos de sus discos, casi todos, y éste, por ahora, no es de los que más valoro, eso sí, tiene algún que otro temazo, ahí si me diste una alegria Caye, cuando te leí lo de Threadgill me acordé que escuchándolo huvo un tema que me dije que era Threadgilliano total. ¿ Está bien lo de no coincidir en todos, verdad ?
ResponderEliminarY veremos que ocurre cuando salga el último de Peter Evans, ése sí que tiene tela, era uno de los conciertos que más esperaba y..... bueno ya hablaremos del asunto cuando toque.
Finlayson se ha formado en la banda de Steve Coleman y eso se nota mucho en su música, el aire threadgilliano que la ha dado al debut apunta muy buenas maneras aunque evidentemente eso no signifique que llegue al nivel del Zooid de Threadgill. En cuanto al disco de la Halvorson a mí no es que me guste, es que me entusiasma, como se puede deducir de la reseña.
ResponderEliminarAcabo de escuchar otra demostración del genio de la Halvorson, el " Ghost loop " es a trío con Hebert y Smith y en directo, también reciente y mostrando su cara menos académica. Aquí si me gusta Chess Smith, y mucho, con Hebert no hay problema nunca, este tío en los créditos que me lo encuentre es suficiente garantía, y de la Halvorson pa qué decir.
ResponderEliminarTambién me ha gustado el " No Morphine, No Lilies " de un cuarteto de la baterista Allison Miller ( de la que no tenía noticias ) con la violinista Scheiman, Sickafoose al bajo y Myra Melford al piano, con invitados como el trompetista Berstein, el cellista Friedlander y algún otro que no recuerdo. En muy divertido podría resumirlo, ya que el resto os lo podréis imaginar a la vista de esos músicos.